Jeff Bezos y Richard Branson, son millonarios en guerra por ganar el espacio. Lo que está en pugna es el turismo espacial.

En una disputa clara por el mejor viaje a las estrellas, Bezos y Branson comenzaron la carrera por la conquista espacial.

Si bien muchos, hasta con algo de prejuicio, creen que es una lucha de egos, la verdad oculta o no tanto, es que el nuevo negocio millonario es el turismo espacial.

No están paseando por el espacio exterior, gastando sus millones. Están promocionado un nuevo emprendimiento turístico.

Tras el vuelo suborbital del millonario británico Richard Branson, y el vuelo espacial del dueño de Amazon, Jeff Bezos, el 2021 quedará registrado en la historia como el año del reinicio de la carrera espacial.

Estos nuevos viajes a las estrellas, van a ser muy diferente a la que protagonizaron la Unión Soviética y EEUU en el siglo XX, ya que aquí los oponentes son magnates del sector privado que luego de dos décadas de costosísimas pruebas, éxitos y fracasos, empiezan a ver cristalizados los primeros pasos de una nueva, millonaria y revolucionaria industria de turismo espacial.

Los millonarios buscan hacer negocios millonarios. Y en el espacio, sobra espacio.

¿Cómo? Muy simple. Pensemos cuánto cuesta un pasaje al espacio. Imaginemos cierta frecuencia de vuelos. Soñemos con una montaña de dólares multiplicándose.

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El primero: Richard Branson

El británico Richard Branson, quien en 2004 creó Virgin Galactic, fue el primero en ofrecer vuelos suborbitales tripulados que se realizan en una nave con forma de Jet, llamada SpaceShipTwo.

La nave tripulada, es elevada por un enorme avión hasta los 15 km de altura, donde se desprende y activa sus motores para llegar al espacio exterior. Luego vuelve planeando a la atmósfera y aterriza.

Tras varias pruebas que incluyeron un accidente en 2014 que provocó la muerte de un piloto, hace 4 años logró acercarse seriamente al viaje que concretó días atrás.

La nave de Branson, el SpaceShipTwo logró, según la NASA, ser la primera nave comercial en llegar al espacio.

La idea comercial que busca concretar Virgin Galactic, es la frecuencia continua de vuelos espaciales.

De todas formas, el viaje que llevó al magnate a 86 km de altura junto a otros tres acompañantes, ha sido un éxito para la firma, ya que elevó el precio de las acciones de su empresa. Tiene 600 personas inscriptas para próximos vuelos, con pasajes que cuestan 250 mil dólares.

Ahí va Jeff Bezos

Jeff Bezos es el ser humano más rico del mundo y hace pocos días, logró llegar a 96 kilómetros de altura en el cielo del oeste de Texas. La nave espacial fue construida por Blue Origin, su propia compañía de cohetes.

La empresa B.O. fue fundada por Bezos hace más de 20 años con el objetivo de generar lo que se denomina mercado o economía espacial. La compañía tiene como ambición imponer vuelos cortos para los turistas espaciales. Sin vueltas.

Bezos no viajó solo. Sus otros tres viajeros acompañantes eran su hermano Mark; Oliver Daemen, un estudiante holandés que fue el primer pasajero de pago de Blue Origin; y Mary Wallace Funk, una piloto que en la década de 1960 estaba entre un grupo de mujeres que pasaron por los rigurosos criterios de selección de la NASA, pero que nunca lograron la oportunidad de abordar un cohete.

Para no ser menos en la historia y romper records, con sus 18 años, Daemen fue la persona más joven en ir al espacio y con 82 años, Funk, conocida como Wally, era la mayor.

La nave Shepard de Blue Origin realizó su vuelo con éxito, y aun no se sabe el valor de sus boletos, aunque han subastado butacas que se pagaron 28 millones de dólares, cuando la oferta inicial era de menos de 5 millones. Gran negocio.

Se viene Elon Musk

El sudafricano Elon Musk tiene una fábrica de cohetes espaciales. De hecho es la que utiliza la NASA para sus vuelos. Pero Musk pretende poblar Marte, fundar una colonia humana. Como esto parece como demasiado, lo dejaremos para un próximo informe.

No son millonarios derrochando o peleando a ver quién tiene el ego más grande. Son empresarios diversificándose hacia el futuro, impulsando el turismo espacial.