Nada como llegar a casa en busca de alivio ante el calor. Por eso acercamos consejos para aprovechar al máximo el aire acondicionado en verano.

Se viene el verano y con él, los calores que son una maldición o un placer. No hay término medio.

No todos tenemos la posibilidad de estar en la playa o la pileta, y reconozcamos que a veces parece que las paredes calentaran como un horno.

Por suerte inventaron el aire acondicionado, y desde entonces se convirtió en el mejor amigo del hombre.

Pero tampoco es cuestión de abusar, menos aun teniendo en cuenta que el consumo excesivo se notará en la factura de la energía eléctrica.

Por eso, y para no lamentarnos luego, acercaremos consejos para aprovechar al máximo nuestro aire acondicionado en los duros meses de verano.

Buscaremos interiorizarnos en prácticas y usos que permitan que estos geniales aparatos nos refresquen, logrando un buen rendimiento con la mayor eficiencia energética posible.

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Consejos para aprovechar al máximo el aire acondicionado

Si queremos optimizar el uso y funcionamiento de nuestro aire acondicionado, debemos tener en cuenta los siguientes consejos fundamentales:

1.- Mantenimiento: Si el aire acondicionado ha estado inactivo durante los meses fríos, conviene revisarlo previo al encendido en el verano. Tanto los filtros como el resto de las unidades interiores y exteriores, deben quedar limpios para que el polvo y la suciedad no compliquen su óptimo funcionamiento.

2.- Temperatura: Debemos tener un uso racional y controlado de la temperatura que le exigimos. Cada vez que bajamos un grado, aumentamos el consumo de energía. Busquemos una utilización moderada y a conciencia. La temperatura óptima es entre 24 y 26 grados

3.- Ventiladores no: Los ventiladores y el aire acondicionado no son incompatibles. El ventilador distribuye el aire caliente lo que hace que el aire detecte que aún quedan temperatura por bajar. En todo caso, esperemos a que baje el calor ambiente para encender el ventilador y que distribuya mejor el aire frío.

4.- Puertas y ventanas cerradas: El calor por algún lado entra y esto hace trabajar nuestro aire acondicionado. Procuremos que puertas y ventanas permanezcan cerradas mientras los aparatos están en funcionamiento. Si percibimos alguna pequeña corriente de aire caliente, lo más sencillo es poner burletes en las aberturas. En las horas de más calor, bajemos las persianas. No cuesta nada y mantiene el confort térmico dentro de la casa, optimizando la eficiencia del aire acondicionado.

5.- De noche ventilamos: Cuando las temperaturas bajen, abramos todo para que refresque de modo natural. Obviamente apagamos previamente el aire acondicionado. Si el termómetro empieza a subir, cerramos las ventanas. Ventilar entre 10 minutos y media hora por noche es suficiente.

Antes de comprar un aire acondicionado

Busquemos el asesoramiento de un profesional. Por medio de fórmulas se puede establecer la potencia necesaria según los metros cuadrados a enfriar, el aislamiento, las horas de sol que dan en nuestra casa, la cantidad de convivientes y otras variables.

El especialista sabrá evaluar y aconsejarnos antes de comprar el aire acondicionado indicado.

Elegir sin saber puede terminar siendo un problema, comprando equipos que no cumplan el objetivo, que nos harán gastar mucha energía en el consumo o gastando de más con equipos exagerados.

Por supuesto, también es importante elegir siempre un aire acondicionado con buena calificación energética. Esto optimizará el consumo y lo agradeceremos en la próxima factura del suministro.

Ya está. Ahora solo resta tomar el control remoto y refrescar nuestra casa. Como dijimos, el aire acondicionado es el mejor amigo del hombre.